por Darío Juan de Leaniz Sempere, Alumno del V Máster de Empresas MBA de ENAE Business School. Administrador único de Leaniz Sempere, S.L
Las relaciones de agencia, o alineación natural de propietarios y directivos en las empresas familiares, son teóricamente distintas de las empresas no familiares, ya que las primeras están muy influenciadas por lazos familiares que, a su vez, pueden afectar negativamente a la capacidad de los CEO´s familiares en el ejercicio de autocontrol.
Algunos autores hablan de los riesgos - “lado oscuro” - de la propiedad de la familia, que pueden suponer la pérdida de rendimiento empresarial como consecuencia de la falta de un control profesional que distinga las necesidades de negocio de las necesidades de la familia; introduciendo conceptos como el paternalismo o altruismo asimétrico, o el parasitismo familiar.
No obstante, el hecho de que los miembros de la familia, incluido el CEO, tengan un vínculo emocional más fuerte con la empresa, puede mejorar el nivel de compromiso e implicación hacia la organización, motivando a las personas para llevar a cabo acciones que benefician a otros sin esperar recompensa externa y tomando decisiones que incrementan los beneficios y la rentabilidad de su empresa, a la vez que intentan beneficiar a los miembros - familiares- de la misma.
Adicionalmente, las empresas con un mayor familiness suelen tener órganos de supervisión adicionales al consejo de administración -los llamados consejos de familia- que se encargan de administrar cuestiones tan importantes como la definición de la política de contratación y retribución de familiares, las normas de sucesión de directivos, los aspectos relacionados con la propiedad y el patrimonio, la mediación en conflictos entre miembros de la familia, etc.
En definitiva, un mayor grado de familiaridad o familiness, hará que el grado de participación de los familiares en la dirección de la empresa sea mayor y, por tanto, aumentará las posibilidades de que el CEO sea familiar, lo que supondrá un mayor alineamiento de los intereses entre propiedad y dirección, que redundará en mejores resultados de la empresa.