Estamos viviendo una situación sin precedentes, por lo que nadie tiene una guía practica de qué hacer, cómo y cuándo; porque cada mañana nos levantamos con una noticia nueva que afecta a nuestra supervivencia como empresa, y no tenemos más remedio que aceptarla, cerrar o despedir a nuestros trabajadores, solicitar algún tipo de ayuda e intentar sobrevivir en las próximas semanas.
Muchas empresas se encuentran hoy en día en una situación similar: caída brusca de la facturación y una reducción de costes insuficiente para mantener el cash flow en niveles de tranquilidad y seguridad. Una vez superada la fase crítica de la pandemia no parece que los niveles de negocio vuelvan rápidamente a los previos a la crisis sanitaria.
Vivimos tiempos en los que la incertidumbre se ha hecho nuestra compañera de viaje. Desde que hace unas semanas, nuestras vidas empezaron a cambiar drásticamente. Es curioso ver lo acertado que estuvo Maslow con su pirámide de necesidades. En su teoría, se habla que los humanos vamos subiendo en el nivel de las necesidades, conforme vamos asentando otras, como si se tratase de la construcción de una casa.
Todas las
Cuando hablamos de apalancamiento de la empresa, podemos enfocarlo desde dos puntos de vista totalmente distintos, aunque en algunos aspectos puedan estar, en cierto modo, conectados: desde un punto de vista financiero, pero también desde un punto de vista operativo.
El Real Decreto-ley 15/2020, que entró en vigor el pasado 21 de abril (BOE 22/04/2020), establece nuevas e importantes medidas de orden económico, laboral, social, financiero y fiscal para hacer frente a las consecuencias de la crisis del COVID-19, medidas que se añaden a las ya aprobadas por el Real Decreto – ley
Las personas, la sociedad, las empresas estamos viviendo una crisis sin precedentes. Estamos inmersos en una época de cambios, una época en la que la toma de las decisiones adecuadas es fundamental para el mantenimiento de los negocios. Y como toda época de cambios, ésta nos ofrece oportunidades de revisión y mejora.
En general se entiende que los mercados cautivos están asociados a una capacidad de demanda -generalmente son individuos- que están limitados de manera geográfica y con limitadas capacidades para tener alternativas substitutivas en el consumo.
Desde la declaración del estado de alarma por el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, se han dictado varios Reales Decretos y otras normas de diverso rango con importantes disposiciones de orden social, laboral, económico financiero y fiscal, con medidas y ayudas a empresas, especialmente pymes, y a “autónomos”, afectados por la situación derivada de la crisis sanitaria del COVID-19, de la declaración del estado de alarma, y de los subsiguientes cierres de establecimientos empresas y negocios.
Este artículo muestra los resultados descriptivos de una encuesta a empresas sobre el uso de la Retribución Variable en sus compañías.